Por Aneuris Hernández
Joaquín Balaguer, quien gobernó la República Dominicana durante tres períodos (1966-1978, 1986-1996), dejó un legado imborrable en diversas áreas que impulsaron el desarrollo del país. Su gestión fue clave en la consolidación de la democracia, la modernización de la agricultura, la protección del medio ambiente, y la creación de importantes infraestructuras que transformaron la vida de millones de dominicanos.
Aportes a la Democracia
Aunque su mandato fue controversial por las denuncias de autoritarismo, especialmente en sus primeros años, Balaguer jugó un papel central en la transición del país hacia una democracia más estable. En 1994, enfrentado a protestas tras unas elecciones disputadas, Balaguer pactó la reforma constitucional que acortó su período y estableció la celebración de nuevas elecciones en 1996. Este acto fue clave para la pacificación política y el fortalecimiento del sistema electoral dominicano, dando paso a una alternancia de poder y reforzando las bases democráticas del país.
Desarrollo de la Agricultura
Uno de los pilares del gobierno de Balaguer fue su fuerte enfoque en la agricultura. Reconociendo la importancia de este sector para la economía dominicana, su administración impulsó la construcción de grandes sistemas de riego y la implementación de políticas que beneficiaron a los pequeños y medianos agricultores. Bajo su gobierno, se construyeron decenas de presas y canales de riego que aumentaron significativamente la productividad agrícola, permitiendo un mejor aprovechamiento de las tierras y ayudando a garantizar la seguridad alimentaria del país.
Además, se promovió la tecnificación de las actividades agrícolas, lo que facilitó el acceso a mejores herramientas y tecnologías para los campesinos. Estas medidas contribuyeron a mejorar la calidad de vida de las zonas rurales y a reducir la pobreza en estos sectores.
Protección del Medio Ambiente y Construcción de Presas
Balaguer fue un pionero en la implementación de medidas de protección medioambiental en la República Dominicana. Durante su gobierno, se crearon importantes áreas protegidas y parques nacionales, con el objetivo de preservar los recursos naturales y la biodiversidad del país. Entre estos, destacan los parques nacionales de Los Haitises, Jaragua, y La Isabela.
Las presas construidas bajo su mandato no solo tuvieron un impacto en la agricultura, sino también en la generación de energía hidroeléctrica, lo que ayudó a reducir la dependencia del país de fuentes externas de energía y promovió un uso más sostenible de los recursos naturales.
Infraestructura: Caminos Vecinales, Carreteras y Obras Públicas
Balaguer es conocido como el "Presidente de las Obras" debido a la magnitud de su legado en infraestructura. Su administración impulsó la construcción de numerosas carreteras y caminos vecinales, conectando comunidades rurales con los principales centros urbanos. Estas obras no solo facilitaron el transporte de bienes y personas, sino que también dinamizaron la economía de las regiones más apartadas del país.
Entre las principales carreteras construidas se destacan la autopista Duarte y la autopista Las Américas, que mejoraron la conectividad entre la capital y el interior del país. Además, la ampliación y modernización de importantes vías de comunicación permitieron una mayor integración nacional, contribuyendo al crecimiento económico sostenido.
En el ámbito urbano, Balaguer dejó una huella significativa con la construcción de emblemáticos edificios gubernamentales y obras públicas. La construcción de viviendas para sectores vulnerables fue otro de sus grandes aportes, como el proyecto de viviendas de bajo costo, que buscaba reducir el déficit habitacional y mejorar las condiciones de vida de los dominicanos de escasos recursos.
Conclusión
El legado de Joaquín Balaguer en la República Dominicana es innegable. Su enfoque en el desarrollo agrícola, la protección del medio ambiente, la expansión de la infraestructura, y su papel en la consolidación de la democracia, lo convierten en una figura clave en la historia del país. Aunque su mandato estuvo marcado por controversias, sus contribuciones han dejado una huella perdurable en el progreso de la nación y en la mejora de la calidad de vida de millones de dominicanos.